EL RETORNO DE LA DIOSA
También deseo recordarles Amar Incondicionalmente a su cuerpo físico. Sea que actualmente estén encarnados en un cuerpo masculino o femenino, le pido, una vez más, que recuerden sus vidas en las que me servían como Sacerdotisas. Cuando usted era una Sacerdotisa sirviendo a la Diosa, el cuerpo femenino era un templo sagrado. Su molde y forma no fue determinado por aquellos externos a usted, ni por un mundo patriarcal con el intento de disminuir a la mujer.
La Diosa siempre ha vestido muchas formas y las encuentra todas ellas bellas. Algunos de Sus árboles son altos y delgados, mientras que otros son bajos y anchos. Sin embargo, todos se entienden que sirven un propósito que es consistente con su forma. Cada una de mis Sacerdotisas tiene una forma innata que mejor sirve a su propósito. Las Sacerdotisas no tienen que capturar a los hombres. Por lo tanto, ellos no necesitan ser llevados a amar sus cuerpos solamente cuando son considerados bellos por los hombres.
Su sociedad ha entrenado a muchas mujeres a que ellas no son dignas si no se ven como las pocas. Este prejuicio hacia mis Sacerdotisas ha sido también sufrido por mí. Algunas de mis tierras y criaturas han sido estimadas no buenas y han sido destruidas, abandonadas o contaminadas. Amo todo aquello que lleva forma dentro de mi conciencia, tanto como amo el Espíritu que enciende aquella forma a la VIDA.
En cuanto la Energía de la Diosa regresa a mi planeta, se fusionará en el Matrimonio Místico de lo Masculino y Femenino. Entonces las mujeres SENTIRÁN su Interior Masculino y los hombres SENTIRÁN su Interior Femenino. La fusión de la energía de Dios y la Diosa dentro de sus recipientes físicos terrestres activará su Niño Interior Divino, quien madurará en su Adulto Divino. Sepan que la forma que su SER usa, su actual recipiente terrestre, es el Templo Físico de su Espíritu. Amen Incondicionalmente a su Templo así como Aman Incondicionalmente a su SER Espiritual. Y, Queridos Sacerdotes, les pido que vean la Vida dentro de la forma, y la amen. Les pido a aquellos de ustedes ahora encarnados en una forma masculina también que recuerden la Esencia femenina que vive dentro de USTEDES.
De esa forma, pueden honrar el retorno de la Diosa sin sentir que están de alguna manera comprometiéndose a ustedes mismos. Como Sacerdotes y Sacerdotisas por igual retornan al Cuerpo de Luz. El Matrimonio Místico de lo masculino y femenino fusionará sus polaridades de géneros en la UNIDAD de los mundos superiores. Buen día, por ahora, Queridos Sacerdotes y Sacerdotisas de mi cuerpo. Les envío Amor Incondicional por cualquier sea el cuerpo que usan. — Gaia.
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