El orgullo de una nación para el premio Nobel de la Paz, Gracias Yrene Margarita Martinez eres mi ángel y bendiciones para ti. tu Tata Maya. Que te Ama.

[MARIO ROLANDO VIDES ALVARADO]

Estoy muy orgullosa de escribir este artículo sobre alguien a quien muchas personas tienen el honor de conocer como un SER de mucha luz dedicado a ayudar a la humanidad,

no solo como canta-autor, como periodista, médico homeópata, como creador de un método para enseñar a los niños con dificultad de aprendizaje, con diversos síntomas  y no es solo la ayuda al niño sino a los padres para que todos estén sintonizados en una misma vibración,

en esta labor social lleva muchos años de su vida, cuando era un joven y represento a su país en muchos eventos, quien ha sido un orgullo para todos los Guatemaltecos.

Ahora como Anciano Maya representando a todas las Etnias Indígenas asumiendo la responsabilidad de la Fundación Mario Vides, Ancianos Mayas para así cumplir un gran sueño que ha acariciado desde hace muchos años en agradecimiento a todo lo que Dios el Creador le ha dado para cumplir con su gran Misión de Vida.

Querido amigo Tata Maya tienes todos los méritos para ser nombrado en el Premio Nobel de la Paz.

"Dios ha hablado y continúa hablando a través de toda la creación y en el corazón del hombre mismo.
No es pues exacto decir que ha hablado solamente a tal profeta, a tal fundador de una religión. Sería más justo decir que algunos seres le escuchan y Le oyen mejor que otros.


Dios habla, no cesa de hablar, y cada uno Le oye según su nivel de conciencia.

Habría que añadir también que lo que los seres han oído y relatado estaba necesariamente determinado por la situación, los problemas y la mentalidad de su tiempo.

En lo que respecta a los grandes principios, todos han dicho lo mismo. Pero cuando entramos en el detalle, nos vemos obligados a admitirlo: algunas prescripciones eran sin duda aceptables y hasta necesarias hace algunos siglos o milenios, porque respondían a ciertas necesidades y representaban entonces un verdadero progreso, pero en nuestros días, ya no pueden ser aceptadas, ya no pueden adaptarse."

Omraam Mikhaël Aïvanhov