RELATOS Y CUENTOS: ENSAYOS AGRICOLOAS CON EL CAMPESINO.

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RELATOS Y CUENTOS: ENSAYOS AGRICOLAS CON EL CAMPESINO.

Por: Orlando Parra D.

Este relato se remite a unos 30 años atrás y hace referencia, a como en muchas regiones del país se experimenta  con cultivos agrícolas a veces sin ninguna resultado.

Una entidad del gobierno que tenía que ver los las políticas del agro, promocionaba en esa época cierto tipo de cultivos como fue el cardamomo, la pitalla, el maracuyá, por enumerar algunos.

Eran propuestas formuladas por comerciantes extranjeros como los Árabes, japoneses, Americanos y Canadienses. Al  vender la idea al campesino pues la veían como algo maravilloso para sus entradas económicas, y muchos sustituyeron cultivos de café por cultivo de Cardamomo, otros potreros de pasto por cultivos de pitalla y maracuyá.

Los comerciantes Árabes prometieron comprar la producción de cardamomo que es una hierba perenne que su fruto se usa como aromatizante o condimento en gastronomía por su aroma.

Todo funciono bien hasta que llego la cosecha y apareció el comprador, pero cuando vino el control de calidad por parte del exportador, este fruto o pepa fue rechazado en un 90% por sus defectos semilla muy pequeña, necrosada en las puntas, unas median menos de un centímetro, color un poco negruzco, vainas arrugas en sus extremos. El comprador exigía semilla o fruto entre 1.5  a 2 centímetros de color verdusco  o amarillento todo parejo.

Conclusión nadie vendió su cosecha que  de una arroba de 25 libras de peso salía con el control escasamente un a dos libra, perdió el agricultor, no hubo política de alternativa en esa época para este cultivo y ellos arrasaron con el cardamomo y volvieron a sembrar sus matas de café.

La pitalla es una planta trepadora que se adapta a diferentes condiciones climáticas es de la familia de las  cactáceas, produce un fruto que contiene fibra y mejora los problemas digestivos como el estreñimiento, el cultivo se inicio pero no hubo la suficiente asesoría técnica en sus prácticas fito-sanitarias, los Japoneses compraron toneladas del fruto, llevadas en cajas en conteiner, como muchos países del mundo son muy estrictos  en su control para evitar introducción de plagas u otro tipo de químicos que afecten la salud de quien lo va a consumir.

Fue así como se tomaron muestras del fruto para su análisis y en la cascara de la fruta se encontraron trazas de agroquímicos o plaguicidas, por lo cual el producto fue rechazado y se perdió, el conteiner fue arrojado con frutas y todo al mar que para que se formen corales, nuestro campesino no ha sido educado en el manejo de cultivos limpios sin el uso de agroquímicos y es una práctica actual donde es mas el químico que se usa. Otro ensayo perdido.

El maracuyá es una planta trepadora cuyo fruto es una valla ovalada, recubierta de cascara gruesa, su pulpa contiene semillas pequeñas y el sumó de esta fruta se exportaba a Estados Unidos y Canadá, en unas canecas de 55 galones que en su interior eran recubiertas con bolsas de plástico de buen calibre, la caneca se sellaba herméticamente para su exportación.

Su siembra creo expectativas ya que la cosecha era recogida en el sitio de siembre en volquetas y llevada a la despulpadora donde se le extraía el sumo, todo funcionaba muy bien tracto mulas cargaban las canecas para su exportación.

Todo funcionaba bien en el negocio hasta que unas disputas entre socios y alguien denuncio que el sumo de maracuyá iba mezclado con polvo de coca y así era exportado y así llegaba a los Estados unidos para su proceso y separación. Se dio la intervención del gobierno en la despulpadora se hicieron análisis que dieron positivos para coca y el negocio se vino a pique.

En la actualidad el sumo de maracuyá se usa  para hacer vino, y con esencias importadas de frutas como manzana y otras frutas  se mezcla  y se venden en el mercado con nombre como vino de manzana.

Y como dijo el poeta vida de pobre de esperanzas se  sostiene doblando el lomo para que otro doble sus bienes.

Orlando Parra D.

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Ciudad: Ibague-Colombia.